los glaciares no son estatuas impasibles a las inclemencias del tiempo, sufren cambios ciclicos que conforman su forma y embergadura. el invierno da paso al verano y con él, el deshielo de estos gigantes blancos que nos hablan sobre su cuerpo
Profundas son sus grietas, algunas de kilometros de profunidad , lo cierto es que incluso dentro de su peligrosidad, son hermosos y sus superficies nos hacen imaginar esos miles de años sobre sus laderas.
Durante meses se preparan para caer al mar y bañar de blanco impoluto las aguas , darle cama a los lobos y focas mientras barados se deshielan y recorren la magnitud antártica.
De arriba a abajo , de abajo a arriba, sus cumbres se pelan y desnudos nos dejan su busto, el color de su carne y consistencia.
El momento ha pasado y la poesía evoca, la imagen se queda en tu retina.
Muy buenas fotografías. Abrazo desde Base Marambio.
ResponderEliminarAmazing, I can't even imagine !
ResponderEliminar